Mosquitos

(Culex pipiens and Aedes sp.)

Biología:

Los mosquitos se encuentran en todas las partes del mundo. Las especies más habituales en nuestras latitudes tienen un tamaño de unos 5 a 10 mm y son de color marrón grisáceo poco llamativo. Las larvas se desarrollan en el agua. Así, la mayoría de las especies de mosquitos del género Aedes (con la excepción por ejemplo de Aedes albopictus, el mosquito tigre asiático, que como "reproductor en contenedores" deposita sus huevos también en pequeñas charcas de agua) pertenecen a los mosquitos propios de áreas inundadas. Incuban sus huevos en suelo húmedo y aparecen en zonas geográficas fluviales sujetas a inundaciones. "Culex pipiens", por el contrario, pone sus huevos directamente sobre superficies con agua, por ejemplo en contenedores de lluvia, canaletas, charcas, charcos. Las hembras precisan alimentarse de sangre para la reproducción, por lo que pican a humanos y animales para conseguirlo.

 

Daños:

Los mosquitos provocan un picor muy desagradable con sus picaduras. Su vuelo, con su zumbido característico, también puede resultar también muy irritante. En los países tropicales, sobre todo, las picaduras de mosquitos transmiten enfermedades peligrosas.

 

No obstante, las especies de mosquitos procedentes de los trópicos y subtrópicos también han conseguido en los últimos años establecerse en nuestras latitudes. Entre las especies que lo han conseguido está el ya mencionado mosquito tigre, que procede originalmente de los trópicos y subtrópicos de Asia. Este mosquito es transmisor de virus como el del zika, el de la fiebre de chikunguña y el del dengue, por lo que es un peligro potencial en la transmisión de esas enfermedades al ser humano. El mosquito tigre asiático ha conseguido extenderse desde el sur de Europa hacia el norte y aclimatarse en nuestras latitudes más frías. Ese proceso ha resultado posible porque el mosquito, que aparece en regiones frías o cálidas, está en condiciones de desarrollar los llamados huevos en estado de diapausa o latencia. Este tipo de huevos son capaces de sobrevivir durante meses a períodos de sequía y frío y retornan al ciclo de desarrollo en cuanto mejoran los factores medioambientales que los rodean y entran en contacto con agua. Esta circunstancia es la que le permite al mosquito tigre superar el período invernal en nuestras latitudes.

 

Consejo:

Evitar sitios abiertos con agua (por ejemplo bidones abiertos), que sirvan a los mosquitos como lugares de incubación, puede contribuir eventualmente a evitar una infestación. Actualmente, se emplean preparados con base bacteriana (Bti) para combatir de forma biológica las larvas en grandes superficies y con resultados satisfactorios. Estos preparados también pueden emplearse en el entorno de jardines particulares. En las horas de mayor actividad de los mosquitos (al atardecer) es recomendable utilizar sustancias (repelentes) para proteger la piel y evitar sus picaduras.